En los últimos años se ha hablado de un grupo urbano que ha surgido dentro de los misteriosos gustos y aficiones generacionales, «los chavo rucos», los cuales son una congregación de personas que se han constituido permitiendo el libre desarrollo de sus caprichos e intereses. Esta comunidad se ha extendido cada vez más y en el ámbito político no podía faltar su representante, quien orgullosamente está compitiendo para gobernar el estado de Hidalgo, Omar Fayad Meneses (@omarfayad).

Omar Fayad ha ocupado en dos ocasiones una curul en la Cámara de Diputados y diversos puestos directivos en Hidalgo. (Foto: imagenzec.com.mx)

Unos lo conocen más por ser el esposo de la actriz de telenovelas Victoria Ruffo desde 2001 y otros por su trayectoria política, lo cierto es que para nadie es un secreto que el senador de la República hasta el pasado 4 de abril de 2016 (cuando solicitó licencia a esta instancia legislativa para separarse de sus funciones y preparar su campaña para gobernador), es un hombre con características de «chavo ruco». Quienes lo conocen seguramente lo han pensado y quienes no, tendrán la oportunidad de demostrarlo con las fotografías, ya que como dicen por ahí: «una imagen habla más que mil palabras». 

Las características de los «chavo rucos» son: tienen más de 35 años de edad, pueden estar solteros o casados, el 85% de los chavo rucos traen el celular en el cinturón y no utilizan ropa de señor.

El candidato priista tiene 53 años de edad  (nació el 26 de agosto de 1962). En diversas ocasiones se le ha visto con por lo menos dos celulares sostenidos del cinturón, así como vestido de forma muy juvenil. 

(Foto: network54.com/lasnoticiasmexico.com/nacion.com)

Otras de las características que se encuentran en un «chavo ruco» son: No le gustan que le digan «Don», le gusta dirigir el baile de la canción «No rompas más mi pobre corazón», escucha Moenia, Timbiriche, Luis Miguel, Emmanuel, utiliza mucho la frase «en mis tiempos», su estación de radio preferida es Universal Stereo, y dentro de su lenguaje se encuentran expresiones como: ¡ay papá!, ¡qué hongo!, ¡A wilson!.

(Foto: esmas.com/tvnostas.com)

(Foto: pinterest.com)

*Con información de SDPnoticias.com