En octubre de 2014, Dilma Rousseff obtuvo la reelección como presidenta de Brasil en medio de la votación más cerrada en la historia del país desde la redemocratización en 1985. Con 51,64% de los votos, le arrebató la posibilidad al liberal, Aécio Neves, quien obtuvo el 48,36% de los sufragios. Hoy, tras una sesión plenaria histórica que duró 21 horas casi ininterrumpidas (desde las 10 de la mañana a las siete de la madrugada), el Senado brasileño aprobó el proceso de destitución contra la presidenta Rousseff. El resultado de la votación fue: 55 a favor contra 22 en contra. El el juicio político que discurrirá en el dicha cámara, como máximo y a partir de hoy, durante 180 días, decidirá si la mandataria brasileña cometió crimen de responsabilidad hacia la República.
Rousseff nació el 14 de diciembre de 1947 en el estado de Minas Gerais en el seno de una familia de clase media formada por un inmigrante búlgaro y una brasileña. Desde su juventud, Dilma mantuvo una militancia contra la dictadura militar que gobernó el país brasileño entre 1964 y 1985.
No la tuvo fácil. Cuando era joven, participó en las organizaciones armadas de la resistencia al régimen de facto conocidas como Colina (Comando de Liberación Nacional) y VAR-Palmares (Vanguardia Armada Revolucionaria), en donde fue presa, torturada y pasó tres años en prisión a comienzos de los años 70.
Estudió Economía en la Universidad Federal de Río Grande del Sur y se graduó en 1977. Pocos años después el nombre y la imagen de Dilma comenzaron a hacerse presentes en el escenario político, pues se unió al Patido Democrático Laborista y ocupó la silla de la secretaria de Minas y Energía en el gobierno de Río Grande do Sul, fue a partir de ahí, cuando la transformación de la funcionaria comenzó a tener lugar. En 2001 renunció al PDT y se unió a las filas del Partido de los Trabajadores (PT), quien era encabezado a nivel nacional por Lula da Silva, quien en el 2002 ganó las elecciones y se convirtió en presidente de Brasil. Tras asumir el cargo, Lula designó a Dilma como Ministra de Minas y Energía y después, Jefa de Gabinete en 2005. En el 2009 Rousseff fue diagnosticada con cáncer linfático, el cual logró superar tras meses de tratamiento.
El 31 de marzo de 2012 renunció a la jefatura del gabinete presidencial para postularse como candidata del PT a la presidencia, elección que la llevó a su primer cuatrienio. Durante este tiempo, Rousseff ha sufrido varias transformaciones en su imagen y pareciera que con cada cambio de puesto, también decidiera cambiar de imagen.