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Eduardo Amerena y las demandas que enfrenta el Auditorio Nacional
«Con Eduardo Amerena Lagunes en el Auditorio Nacional algo huele mal»: así lo dice en entrevista para Cuna de Grillos Gabriel Kleiman López, apoderado legal de la empresa Amore Auditorio S.A. de C.V. —franquicia de la cadena «Pizza Amore»—, que operaba en el recinto de espectáculos del Paseo de la Reforma desde el primer trimestre de 2016 y que en octubre de 2018 terminó su contrato sin posibilidad de renovación, con lo cual no se respetó la cláusula donde se indicó que contarían con preferencia para tales efectos. Pero no son los únicos. Junto con «Pizza Amore» la concesión del café «Café Rak» de Rodrigo Ávila Kuri, también resultó afectada. La empresa Taco Inn representada por César Gabriel Cervantes Tezacuano, de igual forma quedó fuera del Coloso de Reforma. A decir de Kleiman López todo esto responde a «anomalías que tienen que ver con la administración de Amerena Lagunes».
EN EL OJO DEL HURACÁN
La historia de Eduardo Amerena Lagunes como servidor público no ha estado exenta de escándalos. El 16 de junio de 2016 cuando el secretario de Cultura, Rafael Tovar y de Teresa, informó que Gerardo Estrada Rodríguez salía de la dirección ejecutiva del Auditorio Nacional para ser sustituido por Eduardo Amerena Lagunes, resucitó un pasado escabroso. Según la nota «Funcionario incómodo será el nuevo director del Auditorio Nacional» de Vicente Gutiérrez en el Economista, Amerena Lagunes tiene antecedentes no muy gratos entre la comunidad cultural ya que, en noviembre 1999, siendo director del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) intentó censurar la película La Ley de Herodes para que no se proyectara en el Festival de Cine Francés en Acapulco. Pero resultó contraproducente. Fue de tal magnitud el descontento de la industria del cine que incluso medios internacionales calificaron la decisión de Amerena como un acto de censura. Un mes después del encono social el presidente del entonces Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa, anunció la salida de Eduardo Amerena del Imcine.
El 20 de junio de 2016, la columna de Humberto Musacchio «La República de las letras» que publicó en Excélsior, también contribuyó para refrescar la memoria sobre el currículum de Amerena Lagunes: «En ese tiempo, 1994, protegió, a la familia de Ernesto Zedillo, ya presidente electo, pues sus familiares no cumplieron con los contratos con que se habían beneficiado». En el año al que se refiere Musacchio, Amerena se desempeñaba como secretario técnico de Conaculta.
LAS IRREGULARIDADES EN EL COLOSO
Con la llegada del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Eduardo Amerena, abogado de profesión, se reunió con los concesionarios de alimentos y bebidas para cancelar sus contratos y evitó que pudieran participar en las próximas licitaciones, así lo reveló Gabriel Kleiman López. El mismo empresario mexicano explicó en entrevista para Cuna de Grillos que el actual director ejecutivo del Auditorio Nacional no respetó el derecho de preferencia para concesionar el servicio de bebidas y alimentos, y tampoco convocó a una licitación para dicha concesión como en años anteriores se había hecho. Es decir, en esta ocasión Eduardo Amerena realizó una adjudicación directa a favor de una única empresa: Grupo Looptonic, que maneja el restaurante Butcher & Sons.
Por tal motivo, Kleiman López y sus socios decidieron demandar al Auditorio en octubre de 2018, después de que concluyó su contrato de tres años. Sin embargo, no fueron los únicos, también procedieron legalmente los abogados de los negocios «Café Rak» y «Taco Inn». Estos últimos interpusieron más de cinco demandas al Auditorio Nacional por diversos motivos. A decir de una fuente que optó por el anonimato «actualmente el Auditorio Nacional tiene alrededor de 40 demandas».
Este medio buscó concertar una entrevista con Eduardo Amerena, pero atendió la solicitud Maricarmen Glezz, coordinadora de Prensa del Auditorio Nacional, quien respondió que debido a los acuerdos de confidencialidad de los contratos no podían emitir una declaración.